miércoles, 31 de marzo de 2010

LA CARICIA CANDENTE


Susúrrame un verso
con labios que hagan soñar
convierte el instante en deseo
que la sábana del pudor quiera huir,
desnuda tus alas
mueve las nubes en cortos vuelos
para que los miedos que me acorralan
respiren vida de tu alma hasta morir.

Susúrrame tus palabras
en palabras que hablan mi voz
arrancadas al estribillo de una canción
que mi piel si las escucha se inflama,
acércame tu silencio
que no quede sombra entre tu y yo
que cada muerte sea resurrección
y cada parte tuya sea en mi hasta vivir.

Susúrrame un rastro
que mis pasos aprendan a seguir
aunque sean horizontes de maldición
aunque sus risas quieran sufrir,
déjame tu vacío
que de mis letras pueden hervir
aun siendo escribir el único camino
yo lo escribo como lo oye el corazón.

Susúrrame algún verso
en letras que el viento canta,
que solo hay un sol y una Luna
y solo una como tú.

¡Feliz cumpleaños!

lunes, 29 de marzo de 2010

ADIVINANZAS


Preguntas que se responden
sin el miedo a las conjeturas,

que se adivinan en el aire
como hojas de esperanzas cumplidas
y trepan el inconsciente
de las zarpas de la envidia,

con las limpias asperezas rendidas
en recuerdos que no se recuerdan
por la mentira presentidas,

con sucesos que se imaginan
mas allá de los sueños del aire
sin que se noten las prisas,

que no se detienen mientras caminan
por escuchar la sabiduría
convertirse en ígneas sonrisas,

tentador sueño que vuela
al fulgor de las brisas
que te acompaña al horizonte
donde nos miramos cada día,

despertar lo desconocido
abriendo los secretos a la vida.

Fotografía de Lita

lunes, 22 de marzo de 2010

MANTO GENEROSO


Espero dejar caer la voz en el silencio
acunando un pensamiento alborotado,
en cada momento que en ti pienso
por cada palabra que se hace regalo.

Deseo envolver el vacío que me llena
con el abrazo de tu mágica presencia,
desnudando de tu ausencia el fracaso
al sol herido de una Luna plena.

Garabatear en tu nombre hojas de blanco
regalando alguna luz a mi ceguera,
arrancando sombras a la noche oscura
y acomodando para ti unas pobres letras.

Lamiendo los sabores de los colores
enseñando a los labios tus huellas,
bebiendo en las bocas de los tintes
alfombras de caminos sin metas.

Aún así, todo me parece poco
si escribo con la cómplice espera,
mojando la pluma de lo eterno
y que contigo lleguen las primaveras.

Fotografía de Pedro Garcea

martes, 16 de marzo de 2010

JINETES DE POLVO










Modelamos al infortunio
cada día que se duerme la espera,
encallando designios que brotan
de la callada Luna muerta.

Apagamos los brillos
del solitario espíritu que lo tolera,
con ojos ciegos de coronar corazones
en sombras de tintas siniestras.

Dejamos saber amar
por cada mano que abandona,
abrazados de ese gozo ardiente
en cada despertar de la aurora.

Besamos en la nada
arañazos con labios de esperanza,
con las bocas mudas de palabras
que en el papel se quedan.

Sonreímos de miradas
las estrofas que trajo tu viento,
a los caminos que no tienen distancia
y que llevan las letras al cementerio.

Sembramos sin semillas
las cosechas en brisas de campos,
leyendo los destinos que cabalgan
dejando sus huellas en el barro.

Trazamos horizontes
esculpidos de sueños ufanos,
galopando las estelas
dejadas en el mar por los barcos.

Escribimos sin estrellas
a ese cielo que vaga profundo sin ellas,
sorteando las penitentes tinieblas
llenando de poesía los espacios.




Fotografía de Esther Jiménez

viernes, 12 de marzo de 2010

ESTABA ESCRITO


En un mundo pequeño de gotas
con el sol en brillos de espejo
el deseo de un ansia por la vida
saluda con arañazos en los besos,
y en los fondos del reflejo su alma
en llamas de poeta sofocadas a lo lejos,
en callejuelas sin viento de palabras
sembrando restos de incruentas batallas
caídas en el latir de corazones dispersos,
que olvidándose se desmayan inhiestas
en manantiales de caños secos,
amaneciendo en caminos de letras
perdiéndose entre recovecos,
amándose con el brotar de las mañanas
consumiéndose en un adiós
y envenenando de tintas los versos.


A la memoria de Miguel Delibes
 
 

martes, 9 de marzo de 2010

BRUÑIDA CERTEZA


Nada soy sino soy yo mismo
mintiéndome cuando me siento
sintiendo cada vez que miento
oyendo al tiempo orillarse de ausencias,
alejándonos el uno del otro
para intentar saber quien fuimos.

Camino de noche hambrienta
la duda va tras su sed,
sin rastros de puertas abiertas
escupiendo la insensatez,
la pasión deambula harapienta
en boca de la mudez,
dejando en las baldías cunetas
palabras en tu pared,
escritas casi siempre a tientas
de silencios que lloraré
con lágrimas que valen la pena.

De todo apenas ha sido nada
y las estrofas que por ti escribo
el viento las lleva sujetas del estribo
a los pies de una noche manchada,
donde la nada pudo ser todo
donde todo ya es lo mismo.


Fotografía de Lita

sábado, 6 de marzo de 2010

ADVERTENCIAS




Si el silencio carece de palabras
lo llenamos de callados ecos,
suspiros ingrávidos y peregrinos
pintados con los colores del agua.

Si la garganta anda muda de letras
con los labios ateridos de fragancias
y besos en jardines de sueños
en confidencias que respiramos.

Si la asfixia de un cielo cubierto
sacia la sed de agua los campos,
se busca apaciguar la de los abrazos
con la nostalgia del libro abierto.

Si estuviera escrito lo vivido
los vacíos se habrían llenado
y las letras arrastradas por tu viento
nunca jamás se habrían borrado.

Si se hicieran de nubes tus rastros
acabarían tallados en la edad,
compartiendo melodías con los astros
soportando la intemperie de la realidad.

Si se vieran cielos de cristales
aunque los versos parezcan acabados,
se moverían las palabras en el silencio
rellenando tus espacios.

lunes, 1 de marzo de 2010

ANIDANDO EN LAS NUBES


Del forjado silencio nace un sueño
en encuentros que no se buscan
entre universos que no se juntan
revolcándose en sábanas de viento,
bostezando la belleza de la vida
recordándome que de ti estoy hambriento
de tus labios, de tu voz y de tu aliento,
por la montaña de una ola sacudida
o por el valle que atraviesa un eco,
llueve la canción que por ti siento
goteando estrofas que no miento
en un cielo que transita sin tiempo.

Caminando en su azul sosiego
sin verte, sin besos y sin recuerdo,
suponiéndote en las miradas
hacia ti me deslizo en un vuelo,
con las nubes esculpidas entre nieblas
hechizando de palabras tu estela
tejiendo las madejas de un cuento,
con la inmaterialidad de los versos
gritando siempre mirando a tu cielo.

¡Cuántas veces te he amado
en el silencio de un sueño!


Fotografía de Pedro Garcea