jueves, 29 de noviembre de 2007

CALLEJóN DE LA MORRIÑA

Caprichosas letras de versos,
que sobre el papel se ponen a deambular,
en paganas redes de lamentos,
solicitados impedimentos,
que esclavizan estrofas sin parar,
sintiendo con su locura el laberinto de escribir.

Refugio para conversos en el mundo de las palabras,
empezar algo que no tiene fin,
saltar a infinitos vacíos de pensamientos,
desbocados sentimientos,
tinta llorada de lamentos,
ráfagas de existir por existir.

Malditos sueños perversos,
que hacen naufragar los deseos,
en océanos de cuartillas
amarradas a deseos sedientos,
de infinitos finales escuetos,
banderas de emoción por vivir.

…tanto amor no se puede olvidar…
…tanto no se debería sentir.


Fotografía de Pedro Gracia

lunes, 26 de noviembre de 2007

ESPEJISMO

Creí por un día
que la luz era diamante,
un brillo de espuma perdida
una luciérnaga encendida,
un rayo de Luna radiante.

Soñé que sería
una brisa plisada y dormida,
un volcán de risa reciente
una caricia prendida,
un beso de amor inconsciente.

Viví que vivía
una lluvia de malicia,
un relámpago insistente
una mirada de vida,
un escalofrío caliente.

Perdí que perdía
una oscuridad nítida,
un sendero de vida valiente
una sombra sepultada,
la mirada tuya encendida.

Sentí que sentía
espejismo de un instante,
solo rayos de sol por un día.
Fotografía de Pedro Garcea.

sábado, 24 de noviembre de 2007

PEQUEÑO SUSPIRO

Sacudido sortilegio escondido de miradas,
acariciada sonrisa con el color de la esmeralda,
cuna de brisa y sollozo de boca perdida,
fuente iluminada, luz de vida desesperada,
en que me pierde tu caricia.

Bosquejo de niebla en memorias de momentos,
atardecidos roces de deseosos silencios,
cantares de voces y esperanzas ciegas de cielos,
sueños soñados, locuras hechas de firmamentos,
en las que vuelo cuando te sueño.

P.D. Para que te cures muy pronto, Casiopea.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

DESTINO IRREVOCABLE

Mi alma lo grita, no escribas,
que las puertas del miedo abiertas

han dejado pasar el pesar,
palabras que un viento arrastra
a secos versos por arreglar.

El grito se ha ido extendiendo
siempre con el mismo mendigar,
repetida chispa de verdad,
instantes que creen los imposibles
esperanzas acabadas de ahogar.

Letras que se han vuelto heridas
partículas de tiempo sin hablar,
ecos de tibia claridad,
esperas de almas infinitas
estrofas escritas sin pensar.

Alma, grito y letras
unidas tanto, aun hoy, aún hay,
que no te dejan escapar,
no te duelas porque me duele,
pero lo escrito, escrito está.

Fotografia de Pedro Garcea

martes, 20 de noviembre de 2007

PLEGARIA


Si pudiera pedir
concederme un momento,
acompañarlo de una sonrisa furtiva,
o mejor, de una mirada perdida
que se te pueda escapar.

Si pudiera rogar
tener fe de sacramento,
probaría a decir desde dentro,
como si el mundo se acabara
que es posible olvidar.

Si pudiera tocar
nubes en cielo abierto,
acariciaría tu piel incendiaria,
retazos del último encuentro
que me haga recordar.

Si pudiera soñar
que por un instante te tengo,
con las manos desperdigadas,
en orgía sobre tu cuerpo
besaría por besar.

Si pudiera volar
te llevaría a disfrutar sin lamento,
enredaría a la noche de Luna llena,
conquistando besos de viento
para que te dejes amar.

Concédeme lo que te pido
aunque no se si es querer o quimera,
que de pedirte a ti te pidiera,
regálame una noche como aquella
y nunca te querrás alejar.
Fotografía de Pedro Garcea

jueves, 15 de noviembre de 2007

AMOR CON LOS DÍAS CONTADOS

El respeto danza con envidia
cuando el aire escapa de tu boca
y el horizonte es el temor,
si mi alma respira loca
oculta tras tu desnudez.

La verdad duerme en el silencio
sembrada en la duda de la caricia
y la vida en tu sonrisa,
salpica estrellas por doquier,
resbalando a gotas por tu piel.

Las manos que antes mentían,
los deseos que buscan a otro ser
y la ilusión vuelve a nacer,
latidos de destinos que palpitan
en caderas arenosas de mujer.

La sed de ti se hace avaricia
porque lo mejor ni se palpa ni se ve,
solo se siente cuando te empapa
y el infinito contigo estrecha,
amante estrella de lucidez.

miércoles, 14 de noviembre de 2007

PAYASO DESMAQUILLADO

Cuando quede una sonrisa colgada de la única estrella,
no sabré lo que hacer.

Cuando el viento llore su última lágrima,
no sabré lo que hacer.

Cuando la niebla se muera posada en tierras de ceniza,
no sabré lo que hacer.

Cuando la caricia se duerma sobre las sábanas de un sueño,
no sabré lo que hacer.

Cuando el cielo se abrase y las estrellas fenezcan,
no sabré lo que hacer.

Cuando la esperanza se duela del luto atado de resurgir,
no sabré lo que hacer

Cuando la amistad camine ciega apoyada en la seca piedra del amor,
no sabré lo que hacer.

Ahora que se lo que es perderte
estrella infinitas veces perdida,
lloviendo lágrimas de agonía,
no sabré lo que hacer,…para volverte a ver.


martes, 13 de noviembre de 2007

MARIONETA SIN HILOS


Se que te tengo que olvidar
pero mi oficio es el dudar
manipular los recuerdos
en palabras al rimar,
malversar los sentidos,
rebuscar en los pasados
sentidos para amar,
atrapado por los versos
de ansiedad perdidos
que luchan por sembrar,
hojas de pequeños delirios
de amante escondido
que por amor ha de callar,
surcando los sueños dormidos
ojos de mirar llovidos
cegados de tanto llorar,
por que se que no te puedo olvidar.

lunes, 12 de noviembre de 2007

MERECE LA PENA

Darte,
sinceros remordimientos,
dulces sombras que pasan con el tiempo,
como nacen las palabras,
como silban los momentos,
contando sus miserias y misterios.

Decir,
que eres la flor del jardín
coronada como reina de cielos,
que aroma con las miradas,
que duerme con los silencios
asomando sus tristezas y miedos.

Mostrar,
abandonos de placer,
hojas de otoño que bailan al viento,
muriendo como las horas,
como sueñan los amantes
gozar con mundos de besos.

Fingir,
ausencias de momentos,
páginas blancas por falta de alimento,
como lloran los ojos,
como ríen, las sonrisas nerviosas,
cuando te busco y no te encuentro.

sábado, 10 de noviembre de 2007

IGNORANTE DE FE

No creer,
con las calles de las promesas rotas
y las avenidas de rosas muertas,
espacios que sobran y están de mas,
en renunciar para conseguir.

No creer,
con las palabras cansadas y locas
en montañas de versos desiertas,
mundos que se enfrentan y se besan,
en escribir para vivir.

No creer,
con los sueños de espinas y rosas
en destinos que nunca se encuentran,
almas que se buscan ociosas,
en amar para sufrir.

No creer,
con los deseos que siempre invocas
voluntades hechas quimeras,
coloreadas enredaderas que aplastan,
y no creer que el nacer es el morir.



Fotografía de Pedro Garcea.

viernes, 9 de noviembre de 2007

SILENCIO ENTRETENIDO

Me queda la vida por volar y la ausencia de palabras,
jugar con vacíos pavorosos, cada instante,
un momento de tormento y otro bendito silencioso.

Me resta la vida por soñar con amagos de luces ardientes,
relámpagos mudos nerviosos, cada sueño,
va cayendo en pendiente y otro se queda en un esbozo.

Me falta la vida por pensar y besar vidas amargas,
instantes de labios ardorosos, cada idea,
una luz intermitente y destellos de mundos curiosos.

Me basta una vida que borrar con gritos de olvidos hirientes,
el frío de la soledad, cada muerte,
todo queda dormido y grado a grado desaparece.

Fotografía de Pedro Garcea

martes, 6 de noviembre de 2007

EN LA ORILLA

Hoy te voy a esperar
en el agua acostada de horizonte,
comiéndome el sol al atardecer
viendo bajar la niebla del monte,
al lado de lenguas orilladas
esperándote mil vidas.

Hoy te voy a esperar
sobre la alfombra de arena,
caliente y muda de pena,
lamiendo la blanca orilla
espuma de ojos perdida,
en reflejos de luz sobre cristal.

Hoy te vuelvo a esperar
en ese rincón sin nombre,
donde las olas acarician de hambre,
componiendo
una sentina de lágrimas esclavas,
con la canción triste y profunda del mar.

lunes, 5 de noviembre de 2007

ESCÓNDEME ESE BESO


Porque las palabras con el viento llegan donde yo no llego,
persigo pensamientos que te traen.

Porque los brotes de mi locura de amor llenan cualquier jardín,
capturo nubes que te dibujan.

Porque las estrellas en su cielo miran donde yo no veo,
acoso sueños que te sueñan.

Porque sigo trepando por tu cintura sin encontrar el fin,
soy ladrón de te quieros.

Porque los arrullos de la noche te cantan donde yo no puedo,
amarro deseos que te esperan.

Porque las noches que te acompaño las estrellas que nos miran
te robaron un beso, nada vale como ese beso.
Fotografia de Beatriz Iturbe.

domingo, 4 de noviembre de 2007

LOCO ABANDONADO

Te recuerdo que…

…necesito el Mar
para arropar los ayeres,
cubrir de oleajes
el echarte de menos,
y llenar los sueños
de iluminados colores.

…necesito la Luna,
con quien navegar anocheceres,
abrir parajes,
seguir al universo
y pintar los luceros
de fondos estrellados.

…necesito la Noche,
para combatir pesares,
acariciar paisajes,
hablar con el verso
y gritar mudo de deseos
los sueños olvidados.

…necesito el Cielo
para volar amaneceres,
enviar mensajes,
buscar secretos
y acunar los recuerdos
de mundos algodonados.

viernes, 2 de noviembre de 2007

ESTACION DE PASION


Pasando las hojas del otoño dormido,
las ocasiones se muestran,
siempre perplejas,
con tonos de tempestades,
encabritando a las olas de los sentidos.

La caída incesante de partículas de tiempo,
los ratos que siempre vuelan,
fantasmas de parejas,
colores colgados de edades,
en desiertos interminables de destinos.

Vientos posados sobre brazos de nido,
los sueños que se sueñan,
voluntades de siesta,
brumas amansadas de olores
senderos cruzados de locos infinitos.

Cuando el pensamiento vuela hacia ti,
todo se hace manantial
remansando las gotas del rocío,
amaneciendo, detrás siempre estas tú,
hojas de un otoño perdido.
Fotografía de Beatriz Iturbe.

jueves, 1 de noviembre de 2007

LA SANTA COMPAÑA

Cuando sepa que me he ido,
confesaré,
tendré serenidad para crear versos,
habré aventurado leguas de universos
libre para desentrañar secretos,
cantaré las ilusiones,
desenredaré entuertos.

Cuando me haya ido,
regresaré,
volveré como niebla en un sendero,
volaré con alas invisibles de misterio,
portando de equipaje la nada,
mientras camino,
mientras me muero.

Cuando sepa que me he marchado
olvidaré,
dejaré rastros de tinta en los versos,
miraré el todo a lo lejos,
gritaré a las palabras
amando con locura,
como el alma al completo.

Marcharme sin hacer ruido…, así no molesto.