Aquí
he llegado
y
me quedo en ti,
en
una caricia lenta
de
tus sutiles manos,
en
una fija mirada
con
mis deseos guardados,
en
una pose intensa
de
tus buscados abrazos,
en
las huellas de tu risa
que
tus labios han marcado.
Sin
ti,
sin
credo,
sin
brújula,
sin
los senderos
que
a ti me lleven,
me
quedo en ti,
me
quedo a tu lado.
.
Fotografía de Gemma
1 comentario:
Quedarse en el perecer de tu mirada muchas veces convierte a lo allegado en eterno.
Gracias papi.
Publicar un comentario