domingo, 6 de enero de 2008

TITUBEO DE ESCRIBA

No son los rumores canciones del abismo
cantadas por gargantas desgastadas,
escondidas entre noches estrelladas,
son dudosas palabras que no es lo mismo.

El fino hilo que derrama gotas de placer
es el titubeo de corazones perdidos,
voces de labios que siguen heridos,
no es lo mismo saber que reconocer.

Convencido que la verdad siempre equivoca
la duda confunde el camino del corazón,
sintiendo con ese sentido sin razón,
inquietudes que al hombre que cabalga desboca.

Correr siempre detrás del error que te desvía
hace creer en los ángeles malditos,
amar no es un arma de dobles filos
son pobres desvaríos que el destino nos envía.

La caída de las hojas del libro de otoño
el frenesí de cobardías y espejismos,
efervescentes roces de romanticismos,
no es lo mismo el brote que el retoño.

No son los soles ventanas de ojos abiertos,
miradas de crepúsculos inciertos
o sentir que no estamos muertos,
es la necesidad de esparcir todos los secretos, escribiendo.



Fotografía de Pedro Garcea

1 comentario:

Anónimo dijo...

No dudes de palabras nacidas de gargantas rotas.
Aunque los labios sangren, saben y reconocen.
El corazón no duda ni se confunde, no comete errores.
Enciende tus secretos en ese mundo invisible a lo ojos...Y gracias por estar ahí, detrás, al lado y delante de mi.