miércoles, 23 de septiembre de 2020

LA RAZóN SE HACE AMOR











Tan sólo acomodo palabras
que en principio fueron letras,
para la sed de unos labios
que nunca preguntan
pero siempre me inquietan.
 
Tomo la razón en las manos
y danzo al ritmo de las estrellas,
con vertiginosos trazos
que entre nieblas se yerguen
como versos de mármol
en redoble de cantinelas.
 
Porque el alma me tiembla
con la razón como faro,
volviéndose nerviosa y veleta
cuando el corazón navega
sobre olas de acantilados.
 
Camina entre las nieblas
que la luz le ha dado,
al respirar ecos borrados
hasta que un latido alumbra
la oscuridad que refleja
los ojos que la han mirado.
 
Cada verdad se esconde
tras los embates del enamorado.

 

jueves, 17 de septiembre de 2020

EL AMOR CREó EL INFINITO



 

Todo poema ilumina
al pasajero del tiempo
cuando tembloroso camina
tras un cercado silencio.
 
Letras que del verbo han volado
a los anaqueles del viento
que en palabras han trocado
para convertirse en verso.
 
Nubes de un cielo inmenso
lloran sus gotas sobre la página
con la luz de un tintero apagado,
 
mientras mis labios buscan el beso
que prometieron una caricia mágica
al escribir todo lo que he amado.


Fotografía de Gemma

sábado, 12 de septiembre de 2020

EL ARTE ES UN JUGUETE










Saber esperar,
aguardar que las palabras fluyan,
hacer que los vacíos se diluyan
creando espacios plenos,
por un instante sentirnos eternos
sin el vacío de un tintero inquieto
que se sacia con la escritura,
porque la vida te regala con letras los deseos,
porque el que aguarda lo que busca encuentra,
porque la imaginación nos hace diestros,
aunque la ausencia te despiste
y la distancia te aleje de sus besos
la pluma sacará de entre sus huesos
palabras que en el alma se dibujan,
si la rima te presenta un dilema
o la musa no llama a tu puerta,
aguanta sin partir y siempre espera,
para querer ser poesía, poeta, verso.

 


sábado, 5 de septiembre de 2020

EL ESPEJO


 








Hoy he visto mi rostro
tan ajeno,
tan caminado de años.
 
Envuelto en un sudario
roto, arrugado,
con pómulos gastados
de palidez amortajados,
de cuerpo cansado
y ojos sin fe.
 
He descubierto
que tras el cristal hay otro
que me ha mirado
y no sé quién es,
una forma inquieta
alguien que palpita
fuera de mi,
que me mira
de mudo asombro
sin poder salir.
 
Hoy he visto mi rostro
tan ajeno,
que no reconozco quién fui.