jueves, 24 de febrero de 2022

PENúLTIMA NOSTALGIA



 

Estabas en mis sentidos
cuando el amor era un gesto
que llenaba el vacío,
donde todos los sonidos
dejaban mi cuerpo dispuesto
a bailar por siempre contigo.
 
Y guardé la voz en el bolsillo
al echar leña a la hoguera
pero el fuego no estaba vivo,
e inventé palabras en llamas
para conjurar lo perdido
con el rito mágico de las letras.
 
Y afilé los versos
con la piedra del suspiro
de un corazón renacido,
enterrando la rima
para abonar los blancos campos
con dentados entresijos.
 
Estabas a mi lado
cuando el amor se había ido
arrodillado de fracaso,
y regalé esperanza
cuando solo me quedó
la nostalgia por camino.
 

jueves, 17 de febrero de 2022

RESTOS DE SILUETA







Te sitúo aquí
alzada del patíbulo,
lacia espera apaleada.
 
Te sitúo rodeada
de letras y palabras,
entre comillas ensartada.
 
De impaciencia te siento
y me reclamas,
dócil y sin acechanza,
creando tu universo
con ojos de luz
de un deseo y su esperanza.
 
Con sigilo me acerco
a tus espaldas,
me permites la caricia
que en tus líneas danza,
y compartes latidos
impulsados por los ecos
con los atributos del alma.
 
Me pongo en tu lugar
recortado por las sombras,
con que el olvido no contaba.
 
Y me pongo en marcha
calzando mis sandalias,
para encontrarte en la próxima parada. 

viernes, 11 de febrero de 2022

MAREA DEL AZAR

 


Lo que no es casualidad
muere en su ondina espuma,
queriendo atrapar la bruma
que duerme sobre las olas,
escuchando el eco de las caracolas
al sangrar en la rompiente
como herida serpiente
que su viajera sonrisa acuna.
 
Toma medidas al cielo
que le ayude a leer en el agua,
palabras que el deseo empapa
turbando el lecho del miedo,
que se consume con el tiempo
al romperse en mil sonidos
de un océano de sentidos
mientras su recuerdo se desvanece.
 
Atrapa la luz que anochece
para bailar contigo a solas,
embriagado por las fumarolas
que respiran latidos al verte,
ese suspiro que tienta a la suerte
y a lo esquivo de un furtivo beso
que yace al final del verso
erguido por el brillo de la Luna.
 

viernes, 4 de febrero de 2022

DOLOR DE BIBLIOTECA

 


Cruzo un desierto
abonado con tu nombre
y ahíto del hambre
por un libro abierto.
 
Pierdo las sandalias
entre la tierra y el cielo
de un vacío incierto
donde duermen los saberes.
 
No me quedan letras
para leer el firmamento,
solo el afán sediento
por cumplir con los deberes.
 
Desnudo por dentro
lucho con una hoja en blanco,
para que no se note que ando
de poemas hambriento.