te sitúo en cada paso, en cada instante,
a tí, que eres la luz que nunca se acaba,
a tí, que te imaginé en el silencio,
a tí, que te encontré y no buscaba,
a tí, que de luces me llenaste los vacíos,
que caminas a mi lado sin cesar en el empeño,
que en tu rostro hallé la ternura del primer beso,
la misma mirada que en mi ser florece
como el sol que siempre tiembla en el cerezo.
donde el tiempo duerme,
tu sombra es mi sombra,
mi paz y mi duelo,
no hay distancia que entre nosotros muera,
pues eres la senda, mi amor, mi cielo.
te nombra y me nombra,
se alza y se apaga
con el eco de nuestros sueños,
tú, la voz que calma mis resuellos
y el sentir que el querer siempre sostiene,
tus ojos, dos estrellas de la noche
donde mi ser se pierde en su reflejo,
faros que guían mi destino
y mi pecho, de tu amor, siempre latiendo.
siento en tu mano la fiel promesa
que sujeta el lenguaje del silencio,
tan solo con la miradas,
en cada suspiro,
en cada caricia,
con cada beso,
hacen de la vida algo eterno.
¡¡¡Felicidades!!!