Algo me dice que te nombre
buscando palabras para hacerlo,
aunque no sepa encontrar
voces que te pronuncien
si no es tras los ojos de un hombre,
que mirándote se estremece
al sentirte en el corazón
trasladándote al pensamiento,
notando como creces dentro
en los dominios de la razón,
hombre que de letras enloquece
llenando de sonrisas las páginas,
con caminos por explorar
y cielos de vientos de colores
haciendo felices a las lágrimas,
que aprendiéndote se amanece
entre llamas tenues de abrigo
que se prenden y se apagan,
latiendo de vida intermitente
hasta alcanzar el verbo amar,
que disfrutándote no padece
abriendo el alma al infinito,
calado en la lluvia de tu beso
o guardando los secretos
mecidos por una ilusión,
que nombrarte me nace
hallando palabras para hacerlo
sembradas en los campos del verso
brotando del mismo lugar
por el que suelo pasar a verte.
fELICIDADES
Fotografía de Eyre