jueves, 1 de noviembre de 2012

SUSPIRO CORPóREO









En una calle sin medida
mora el aliento que me mira
acosando una estrella perdida
muriendo por encontrarte,

picando como avispa que envenena
la piel de sus habitantes
cubriéndolos con la condena
de profundos ojos errantes,

se respira cuando la hollamos
de avenidas que se esconden
con sombras hechas de ramos
que se impulsan hasta el desorden,

nace desprendida de la brisa
en las líneas de un atardecer
colgadas de una gran sonrisa
convenciendo al corazón a creer,

se endosa en la piel de la alegría
porque nada llega tarde
cambiando lo lejos por cercanía
tan solo con parar y pensarte,

bromea con las luces por caer
para dormir el sueño de las esquinas
animando a las gotas con distraer
de caminos todas las salidas,

acampa en la infancia y la vejez
lloviendo en hoz de serenata
al sortear como gaviotas la aridez
de cometer cualquier errata,

esa caricia que llega en el clamor
del descaro de una mirada furtiva
donde deja sus huellas el amor,
es sin dudar, el viento de la vida.


1 comentario:

escuchando palabras dijo...

siempre tan bellas palabras...buen finde para vos!!!