Buscándote en las caderas de los sueños, dejándome arrebatar las caricias, naciendo al brote de la pasión, deshaciendo los temores con que te abrigas.
Viendo detrás de tus pupilas, más lejos incluso que su arco iris, me envuelve la cantidad de sonrisas que allí descubro, nerviosas por salir.
Posando mis ojos sobre tu piel, aprendes a robar por subsistir, por permanecer hasta el próximo amanecer, cerca de ese aroma que te hace sonreír.
Cada encuentro, se transfigura en instantes donde robar tu corazón, melodías que comparten soledad, palabras que se enlazan con las caricias de una emoción.
Lograr tener alas con las que al fin volar, que te hagan llegar y me dejen iluminar, aquellos lugares oscuros de tu interior ó acariciar los no descubiertos por nadie.
Me despierto…, y a los inevitables segundos me vuelvo a rendir, a soñar.
Viendo detrás de tus pupilas, más lejos incluso que su arco iris, me envuelve la cantidad de sonrisas que allí descubro, nerviosas por salir.
Posando mis ojos sobre tu piel, aprendes a robar por subsistir, por permanecer hasta el próximo amanecer, cerca de ese aroma que te hace sonreír.
Cada encuentro, se transfigura en instantes donde robar tu corazón, melodías que comparten soledad, palabras que se enlazan con las caricias de una emoción.
Lograr tener alas con las que al fin volar, que te hagan llegar y me dejen iluminar, aquellos lugares oscuros de tu interior ó acariciar los no descubiertos por nadie.
Me despierto…, y a los inevitables segundos me vuelvo a rendir, a soñar.
1 comentario:
No debes rendirte nunca ,pues seguir soñando,es estar vivo y tu seguro que seguiras vivo aun en el mas alla,besos
Publicar un comentario