Somos aquello que se asemeja a los sueños y sentimos más allá de la caricia de un beso.
Permanecemos cerca de los ladrones de deseos y nos quedamos con la mirada fija en las lágrimas del cielo.
Nos encontramos más vivos entre los roces de nuestra piel y embarcamos en los cuerpos de cualquier alma perdida.
Nos vamos con trozos de vida escritos en un papel y sujetándonos las ansias por volvernos a mirar.
Cantamos las palabras que muchas veces nos han hecho perder y pactamos con los errores que nos distancia de la eternidad de vernos.
Solo nos entendemos cuando unos ojos se clavan en otros.
Permanecemos cerca de los ladrones de deseos y nos quedamos con la mirada fija en las lágrimas del cielo.
Nos encontramos más vivos entre los roces de nuestra piel y embarcamos en los cuerpos de cualquier alma perdida.
Nos vamos con trozos de vida escritos en un papel y sujetándonos las ansias por volvernos a mirar.
Cantamos las palabras que muchas veces nos han hecho perder y pactamos con los errores que nos distancia de la eternidad de vernos.
Solo nos entendemos cuando unos ojos se clavan en otros.
Tanto me miento que ya me lo creo.
2 comentarios:
No sabría como decirte...
lo que tus palabras me hacen sentir.
"Errores que nos distancian en la eternidad de vernos..."
Transformas los deseos más ocultos en un juego de palabras capaz de estremecer mi alma cual beso robado o mirada cruzada... sí, esas miradas...
Bravo por ello poeta!
Me gusta mucho como escribes,
pero no me estraña que te inspires con una mujer tan tan bella. donde la encontraste?
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