sábado, 10 de enero de 2015

LA MEMORIA DE LOS OJOS


Cuando eres toda niebla
envuelta por el viento,
que al mecerte te pierde
entre lágrimas de suelo,
con la estela de tu cuerpo
al otro lado de un puente,
que sin tenerte te tengo
orillada en el volátil recuerdo.

Cuando te haces ausencia
en el vacío de la nada,
acabas herida de tinta
acunada en una ojeada,
como carta sin cuerpo
varada en la callada calma,
que sin sentirte te siento
agazapada en una letra apagada.

Cuando te echo en falta
me golpea el frío miedo,
llovido en gotas de palabra
resbaladas de un limpio cielo,
latidas de un verso sin habla
al salir de un tintero de hielo,
que sin leerte te leo
escrita entre burbujas de llama.

Porque la memoria no engaña
y sin verte te veo,
que sin querer te quiero
cuando recuerda mi alma
el encuentro con tus ojos
donde posaste tu mirada.



Fotografía de Pedro Garcea

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bonitas palabras salen de tu tintero,todo nuestro ser tiene memoria y con tu poesía acaricias el corazón!