ESCRITO PARA CANTAR

Reza la leyenda que para poder adormecer la tarde solitaria, con las excusas del tiempo, hay que pagar un precio de sufrimientos.
Suena el cuento que para intentar conocer el final, antes has de leerlo, no tratando de adivinar sino viviendo cada uno de sus momentos.
Canta la cantinela que para saber rozar un corazón, has de tenerlo, sin impedirle desbocar, cuando se lo supliquen los sentimientos.
Llora la música que para lograr amansar la locura, con notas adormecidas por los sueños, se hace necesario morir en todos los intentos.
Ríe la rima que para lograr escribir lo que os cuento, solo puedes relatar lo que tienes dentro, abriendo los sentidos a un próximo reencuentro.